Cavilaciones

La siguiente serie fotográfica inspiró la siguiente narración propia a manera de cuento corto:

Los rostros se oscurecían mientras me adentraba en la oscuridad del ambiente a plena luz de día. La tensión aumentaba con cada paso, rodeado de arquitectura muerta y construcciones para la muerte. Acaso no es extraño como edificamos para que habiten quienes no pueden habitar? les pertenece a ellos, quines se desintegrarán en ella (con el tiempo) y se fusionarán en escombros, juntándose en la única existencia de un cuerpo artificial impuesto por el hombre vivo.
Es miedo? es ilusión? siento que me desintegro y me fundo con el espacio — debe ser la paz de este lugar, no muchos sitios se presentan de esta forma — Quien cuenta la historia la cambia a su verdad, pero era innegable que había más paz en estos campos, en comparación con lo que había tras las murallas de este sitio.
La gente de fuera camina desconcertada y desconectada, vive rápido, come rápido y se muere rápido. Preocupada por lo que otros dicen de ellos y por lo que tienen que pagar o hacer, para según ellos vivir yo lo diría simplemente existir. Empiezo a creer que las murallas no son para que ellos no nos que y les recordemos que su vida artificial es efímera, sino para protegeros a nosotros y no contagiarnos de aquello que escapamos de si vida. No solo existimos sino vivimos a pesar de la muerte, este es solo un estado al igual que muchos otros y puede ser transitorio. Hay quienes se quedan mucho más de lo que deberían y se olvidan o desconocen que se puede trascender, no obstante para nosotros que lo sabemos vemos el panorama completo.
Aquí todo es más lento quizá por que no necesitamos vivir, comer o morir, porque ya estamos muertos y tampoco tiene que ser rápido. No hay cuenta regresiva que descuenta y nos arranca los segundo conforme nos desplazamos en un camino sin retorno de vida que merece ser vivida. Simplemente existimos y cohabitamos con el eso, un algo más grande que no puedo explicar el que es. La mayoría de aqui estamos en la misma sintonía, salimos a pasear y visitamos a nuestros vecinos, hay muchas almas buenas que hemos parado aquí.
Como Luciana quien le encanta correr por los pasillos y alcanzar al viento, ella disfruta mucho esconderse en las sombras y también susurrar entre las hojas de los grandes abetos, pinos y eucaliptos que están plantados por todo el sector. Hay algunos vivos que la sienten cuando ella jugando, les hecha polvo que sus pies descalzos dejan al desplazarse a gran velocidad al cruzarse a la otra esquina. No se bien desde cuándo habita aquí, yo la conocí hace no mucho. Bueno o eso creo, el tiempo funciona muy diferente aquí ya que no es lineal y como mucho aquí también es complicado de explicar. Me gusta pensar que es como un cilindro, se presenta de forma que no existe inicio ni final sino que recorremos todo el espectro existente. Sin embargo, el tiempo se tangibiliza como si habitáramos en un espacio de una mayor dimensión, no lo controlas pero existen espacios nexus que nos permiten a atravesar ese tiempo-espacio como si viviéramos más de una vida y todas al mismo tiempo, como universos paralelos y quizá otros más distantes. Pensándolo bien, este lugar creo que es mucho más antiguo de lo que creo, como una cápsula de tiempo que nos transporta a todos quienes la habitan. Por eso es que digo que se parece más a un cilindro, si existen estos círculos temporales casi infinitos y a través de ellos existen otros infinitos espacios temporales, me pregunto que tan grande puede ser esto que mi razonamiento no me deja pensar , será que este cilindro conecta sus aberturas como si se tratara de una dona hueca? un toroide, el resultado de rotar estos infinitos círculos en un espacio tridimensional. Tomando en cuenta esta inexplicable existencia de múltiples dimensiones y si a su vez este toro se dobla ante si mismo y crea un hipertoro que contiene todo lo existido, existente y quizá lo que hay más allá.
— Hola Salvatore — escuché una voz risueña que rompía el silencio de mis profundas cavilaciones. Hola respondí, era Lucía quien quería jugar conmigo. No muchos la aceptan , supongo que no quieren interrumpir sus asuntos. pero a mi me gusta conversar con ella, me ayuda a pensar diferente. Es pequeña pero ha estado tanto aquí que es muy sabia, no ha perdido su inocencia y su mirada infantil le da una perspectiva profundamente interesante.